Además, los soviéticos pretendían alcanzar una profundidad de unos 49.000 pies bajo la superficie de la Tierra. Y, utilizando un equipo especializado, los investigadores empezaron a cavar una serie de pozos que se bifurcaban a partir de una única cavidad principal. Pero mientras ellos descendían lentamente, los buscadores de Estados Unidos habían hecho sus propios progresos. En 1974, la empresa Lone Star Producing Company realizaba perforaciones en busca de petróleo en el condado de Washita, al oeste de Oklahoma. En el proceso, la empresa creó el agujero Bertha Rogers, una maravilla hecha por el hombre que alcanzó más de 31.400 pies, o casi seis millas, bajo la superficie de la tierra.
